El ladrillo refractario de 220x110x40 mm es un material de construcción especializado, diseñado para soportar y aislar eficazmente altas temperaturas sin degradarse. a diferencia de los ladrillos comunes, su composición y proceso de fabricación le otorgan propiedades excepcionales de resistencia al calor y al choque térmico, lo que lo convierte en un elemento indispensable en aplicaciones donde la exposición a fuego directo o temperaturas extremas es constante.

Características Clave:

• Dimensiones estándar: con 220 mm de largo (soga), 110 mm de ancho (tizón) y 40 mm de espesor (grueso), este ladrillo presenta las medidas más comunes para la construcción de cámaras de combustión y estructuras que requieren propiedades refractarias.
• Composición especializada: fabricado a partir de arcillas refractarias de alta calidad, a menudo con un porcentaje significativo de alúmina (óxido de aluminio) y sílice, junto con otros agregados refractarios como chamota. estos componentes son cocidos a muy altas temperaturas (superando los 1200 °C, y en algunos casos hasta 1600 °C), lo que les confiere su capacidad de soportar calor extremo sin deformarse, agrietarse o fundirse.
• Alta resistencia térmica: su principal propiedad es la capacidad de resistir temperaturas muy elevadas de forma continua, manteniendo su integridad estructural y propiedades físicas. esto previene la pérdida de calor y mejora la eficiencia energética de los sistemas donde se aplica.
• Baja conductividad térmica: actúa como un excelente aislante térmico, minimizando la transferencia de calor a las estructuras adyacentes y manteniendo el calor concentrado en la zona deseada.
• Resistencia al choque térmico: está diseñado para soportar cambios rápidos y bruscos de temperatura sin sufrir daños, lo que es crucial en hornos y chimeneas que se calientan y enfrían repetidamente.
• Durabilidad: gracias a su robusta composición y resistencia a la abrasión y la corrosión química (especialmente en ambientes industriales), estos ladrillos ofrecen una larga vida útil en condiciones de alta exigencia.
• Superficie compacta: generalmente, presenta una textura lisa y homogénea, lo que contribuye a su resistencia y a la facilidad de instalación.

Usos Comunes:

• Construcción de chimeneas y barbacoas: es el material por excelencia para la construcción de la caja de fuego, garantizando la seguridad y eficiencia.
• Hornos de leña y de pizza: fundamental para la construcción de la bóveda y la base de hornos, asegurando una distribución uniforme y retención del calor.
• Hogares y estufas: se utiliza para revestir el interior de estufas y calderas, protegiendo la estructura exterior.
• Aplicaciones industriales: revestimiento de hornos industriales, fundiciones, forjas, calderas, y en cualquier entorno donde se requiera resistencia a temperaturas extremas y abrasión.

Para su instalación, es fundamental utilizar mortero refractario, un adhesivo especial diseñado para resistir las mismas altas temperaturas que el ladrillo. es crucial que la superficie de asiento esté limpia y estable, evitando su colocación directa sobre materiales inflamables como madera o yeso.